La intensa lluvia retraso el inicio de la corrida en media hora, aunque viendo el resultado suspenderla no habría estado mal. La Maestranza convertida en una plaza de tercera, un festival de orejas baratas lleva Sevilla a su punto más decadente una verdadera lástima. Toros de Fuente Ymbro para Finito de Córdoba, que se colaba en un cartel habitualmente mediático, junto a dos toreros que sí cumplen con ese rótulo, Juan José Padilla y El Fandi. 

Finito de Córdoba (negro aterciopelado y oro) dispuesto de inicio ante el distraído y bien hecho primero, manso en varas donde dejó el Fino una media superior. Desfondado y protestón hizo imposible la faena de muleta que solo dejó tres derechazos importantes con la innegable torería del Sexto Califa. Por el izquierdo no tuvo un pase, lo mató tras pinchazo y estocada caída. Silencio.

Dos pares reunidos y en buen sitio de Javier Perea dan cátedra de cómo banderillear ante un fuenteymbro muy justo de fuerzas. Finito le puede con algún derechazo estético pero poco más, no dijo nada el astado. Bien ejecutada la suerte suprema y es nuevamente silenciado, solo detalles.

Juan José Padilla (azul eléctrico y oro con detalles en azabache) inmóvil a porta gayola con gran transmisión, luego variedad capotera. Fueron tediosos los tercios de varas y banderillas, donde se complico mucho el jerezano en su labor. Tras brindar al cantante mexicano Vicente Fernández se puso de rodillas en una mezcla de valor y vulgaridad, esta última continuo con series de trapazos por el derecho ante un público receptivo. Embestida templada y muleta no tanto, pierde las manos el astado justo para que Padilla entierre la espada y corte una oreja muy barata.

Otra vez a la puerta de chiqueros se pasa al toro muy cerca, la plaza hierve tras el saludo capotero. Mucha parafernalia para adornar un tercio de banderillas donde el Pirata colocó todas muy traseras. Fue a más el fuenteymbro pronto y repetidor que transmitió solo, en redondo Padilla nunca lo entendió dejando ir un toro importante con muletazos nada estéticos. Al natural dio constancia de su vulgar toreo sin templar la muleta siempre enganchada por el animal. Y bueno, aquí Sevilla toca fondo, dos orejas inexplicables a una faena solo valiente que baja de categoría a una otrora plaza de primera. 

David Fandila (nazareno y oro) con aceleradas chicuelinas recibe al tercero de la tarde con el que se luce Juan de Dios Quinta en el caballo. Ovacionado tercio de banderillas a toro pasado, mantazos con la muleta y toques en extremo bruscos rubrican una deslucida faena donde el matador siempre perdió pasos. 

También a porta gayola El Fandi que quiso sumarse al circo triunfalista, se las arregló igual para dejar un remate torero con el capote. Despertó el soso astado en banderillas ante un nuevo alarde de físico del granadino. Brinda al público e inicia de rodillas una labor muleteril donde no le puede a un toro siempre humillado y de enorme recorrido por el pitón izquierdo. Muletazos muy largos por ese lado aunque dijeron muy poco, tras infame bajonazo cortó una orejita.